Una inolvidable travesía de curvas y contra curvas ascendiendo en el profundo silencio del bosque, con sus añosas lengas cubiertas de nieve y bajo un manto de estrellas. Luego de sentir la adrenalina de la subida, la tranquilidad y calidez del Refugio reconfortan.
” La luz de las velas junto al fuego de la chimenea, permiten disfrutar de la incomparable vista. Nuestro deck de madera cubierto de nieve balconeando sobre los lagos Nahuel Huapi, Gutiérrez y Moreno nos brinda la mejor vista de la cordillera y el más bello paisaje patagónico. “